Los fiscales estadounidenses acusaron y emitieron órdenes de arresto contra el multimillonario dueño del Grupo Adani y otras siete personas. Dicen que el magnate lideró un esquema con el que acordaron pagar unos USD 265 millones en sobornos a funcionarios indios para obtener jugosos contratos. Miles de millones de dólares desaparecieron del valor de mercado de sus empresas y el presidente de Kenia canceló un millonario proyecto aeroportuario con el grupo.