China estableció siete áreas reservadas temporales de espacio aéreo hasta el miércoles, mientras que Taiwán elevó su nivel de alerta ante el posible despliegue por parte de Beijing de 40 buques navales, así como de la Guardia Costera. Hay temor de que se desate una guerra, pero Estados Unidos trata de calmar las aguas, y se muestra escéptico ante la posibilidad de que un ataque a Taiwán sea inminente.