La ciudad de Los Ángeles, en Estados Unidos, se prepara para el regreso de los fuertes vientos que amenazan con avivar los incendios que se han cobrado ya 24 vidas, además de las 12.300 estructuras que han sido dañadas o destruidas. Frente a la gravedad de la situación, bomberos y militares de México llegaron a Los Ángeles para ser desplegados en las líneas de fuego tras recibir entrenamiento.