Los investigadores surcoreanos suspendieron este viernes la detención del presidente destituido Yoon Suk Yeol por su fallido intento de imponer la ley marcial, después de que un enfrentamiento con el servicio de seguridad presidencial en la residencia de Yoon hiciera «efectivamente imposible» la operación. La Oficina de Investigación de la Corrupción (OIC) tiene hasta el lunes para ejecutar la orden.