Crecen las acusaciones contra el destituido presidente surcoreano, Yoon Suk Yeol, tras su breve declaración de la ley marcial el pasado 3 de diciembre. Los fiscales a cargo de la investigación aseguraron que el suspendido mandatario autorizó a los militares a disparar si era necesario para ingresar al Parlamento e imponer la medida. Entretanto, este 28 de diciembre, miles protestaron a favor y en contra de Yoon, luego de que el Legislativo también suspendiera al presidente interino, Han Duck-soo, lo que deja al país en un caos político.