Dentro del nuevo planteamiento militar israelí en torno a la Franja de Gaza, el Gobierno de Benjamin Netanyahu no ha sido tímido en usar por primera vez en décadas la palabra «ocupación» para definir los objetivos en el enclave. Justificado en la eliminación de Hamás y amparado por la volátil diplomacia estadounidense, Israel allana el camino para cambiar por completo el futuro de Gaza.
