
El ejército israelí bombardeó un suburbio del sur de Beirut en la madrugada del martes, atacando a un presunto militante de Hezbolá y causando la muerte de al menos tres personas. El ataque, ocurrido pocos días después de otra ofensiva, intensifica la tensión y pone en riesgo el frágil alto el fuego de cuatro meses entre Israel y el grupo respaldado por Irán.