
El 18 de marzo, Israel rompió el cese al fuego con bombardeos masivos en la Franja de Gaza, dejando más de 50,000 palestinos muertos desde la ofensiva de Hamás el 7 de octubre de 2023. Las Naciones Unidas denunciaron crímenes atroces contra los habitantes del enclave palestino. Además, Israel bloqueó la entrada de ayuda humanitaria desde principios de marzo.