
Este viernes 21 de marzo, el Departamento de Seguridad Nacional estadounidense confirmó que alrededor de 532.000 personas migrantes provenientes de países como Cuba, Haití, Venezuela y Nicaragua serán revocados de las protecciones legales que sustentan sus permisos humanitarios para estar en Estados Unidos. Washington indicó que los afectados perderán su protección a partir del 24 de abril.