Al menos 130 personas, entre miembros del Ejército sirio de Bashar al-Assad y milicias yihadistas han muerto desde el miércoles, informó este 28 de noviembre el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, luego de que rebeldes lanzaran una incursión en una docena de ciudades y pueblos de la provincia de Alepo. Los rebeldes afirman que lograron las primeras ganancias territoriales desde 2020. Como respuesta, aviones de Moscú y Damasco bombardearon la zona.