El 12 de enero de 2019, los vecinos de la rue de Trévise, en el centro de París, se despertaron por una enorme explosión provocada por una fuga de gas. Mientras eran evacuados, descubrían el horror: cuatro muertos, decenas de heridos y un barrio destruido. Seis años después, algunos finalmente pueden regresar a casa, pero muchos viven entre el temor y la espera de reparaciones.