Los palestinos esperan impacientes que se concrete el acuerdo de alto al fuego entre Israel y Hamás, desesperados por recibir medicinas, tratamientos médicos, alimentos y dormir en paz. A pesar de ser casi inminente la firma del pacto, Hamás no habría firmado el documento porque los delegados israelíes no ha n presentado los mapas que detallan cómo serían la salida del Ejército.