El Banco central de Reino Unido redujo este jueves 8 de mayo las tasas de interés en 25 puntos básicos hasta dejarla en el 4,25%, en busca de estimular el crecimiento económico pese a una inflación anual del 2,6%. La decisión ocurre tras el congelamiento de los tipos de la Reserva Federal (Fed) y marca un nuevo capítulo en la estrategia de los principales bancos centrales frente a un entorno económico global incierto por los aranceles de Estados Unidos.
