Treinta y dos personas, incluidos varios niños, fallecieron en dos estampidas ocurridas durante la distribución de alimentos en eventos benéficos navideños en Nigeria, en medio de la profunda crisis económica que afecta al país. Esto generó un clamor para que las autoridades refuercen las medidas de seguridad en eventos de este tipo y la policía nigeriana instó a los organizadores a obtener permisos previos para evitar tragedias similares.