El presidente electo Donald Trump dio un probable golpe mortal a las negociaciones presupuestarias bipartidistas del Congreso el miércoles, rechazando la medida como llena de regalos a los demócratas mientras el aliado multimillonario Elon Musk fustigó la indignación hacia el proyecto de ley y animó a los legisladores republicanos que anunciaron su oposición.