
En Sudáfrica, un grupo de ‘afrikáners’, o separatistas blancos, crearon un enclave llamado Orania, el cual intentan que sea reconocido como Estado. Para ello, buscaron la ayuda del presidente estadounidense Donald Trump. Previamente, el mandatario ha expresado su apoyo a este grupo descendiente de colonos holandeses, alegando «discriminación» contra la minoría blanca en este país africano.