
Moscú y Kiev siguen acusándose mutuamente de violar la tregua parcial anunciada hace ocho días por Estados Unidos, para intentar acabar con el conflicto. Un ataque con un misil ruso mató a cuatro civiles ucranianos, mientras en Járkiv, ocho personas resultaron heridas tras un bombardeo. Mientras tanto, las negociaciones parecen estancadas, y el presidente Donald Trump amenaza con más sanciones.