El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, dio un fuerte primer discurso, en el que hizo un llamado a Europa para reaccionar ante la «amenaza rusa», asegurando que el peligro se acerca rápidamente y que lo que pasa en Ucrania podría replicarse en otros países. El líder del bloque aseguró que el continente no está preparado para lo que podría llegar en cuatro o cinco años y pidió a los líderes «adoptar una mentalidad de guerra».