El presidente Luiz Inácio Lula da Silva fue sometido a una segunda cirugía en la cabeza. El personal médico asegura que el mandatario brasileño salió bien del procedimiento preventivo, se encuentra despierto y con buen ánimo, pero su imagen ha quedado marcada por sus percances de salud y los brasileños empiezan a cuestionar su capacidad para gobernar. Informa nuestra corresponsal Valeria Saccone.