
La Universidad de Columbia acordó el viernes someter su Departamento de Estudios sobre Medio Oriente a una nueva supervisión y reformar sus normas sobre protestas y disciplina estudiantil, cediendo a la presión económica del presidente Donald Trump, quien había amenazado con retirar fondos federales por 400 millones de dólares que habían congelado varias investigaciones, estudios y nuevas contrataciones.