Los rebeldes sirios aseguraron este viernes que llegaron a los límites de la ciudad de Homs, la tercera ciudad más importante y poblada de Siria, e hicieron un último llamado a las fuerzas del Gobierno para que deserten. En el marco de la ofensiva rebelde, al menos 370.000 personas, «en su mayoría mujeres y niños», han sido desplazadas por los combates desde el 27 de noviembre, según la ONU.