Uno de cada cuatro labriegos franceses se jubilará en los próximos años. Esto significa que más de cinco millones de hectáreas agrícolas cambiarán de manos. Las tierras son muy codiciadas por otros agricultores establecidos y por grandes grupos industriales. Frente a ellos, para un joven es muy difícil instalarse y una guerra por la tierra puede marcar el futuro de la agricultura…