La empresa pionera en entregas a domicilio anunció la transformación de su modelo de negocio en España al contratar a sus repartidores como empleados en nómina. Este giro, impulsado por la ‘Ley Rider’ y sanciones acumuladas que llegan al despacho de la compañía, promete beneficios laborales para los trabajadores, pero plantea retos económicos y operativos para la empresa y sus usuarios.