El sábado 30 de noviembre, el Ejército sirio declaró que los rebeldes islamistas habían entrado en la ciudad de Alepo e informó sobre decenas de muertos entre sus filas durante los enfrentamientos en el noroeste de Siria, lo que le obligó a retirarse de la segunda ciudad del país, mientras prepara una contraofensiva para restaurar la autoridad del Estado. Nuestro corresponsal en Estambul, Adrià Rocha, nos explica cuál es el impacto de la toma de la ciudad.