China acelera su carrera hacia la automatización industrial, alcanzando 470 robots por cada 10.000 empleados en 2023, superando a Japón y Alemania. Con un plan estratégico para duplicar esta cifra en 2025, China refuerza su posición global en este sector mientras internamente lucha con el envejecimiento de su mano de obra y una baja tasa de natalidad sin precedentes.