Rusia reconoció este jueves 6 de febrero que Ucrania lanzó una contraofensiva en la ciudad fronteriza de Kursk, al cumplirse seis meses desde el comienzo de la incursión ucraniana en esta zona. Según Moscú, sus tropas repelieron el ataque. El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, insinuó que esta operación le puede dar una carta negociadora importante.
