El plan del presidente Donald Trump de imponer aranceles a México, Canadá y China apunta, en parte, a combatir el flujo ilícito de fentanilo a suelo estadounidense, donde, según las autoridades, el opioide causa alrededor de 70.000 muertes por sobredosis al año. Gran parte de la droga proviene de los tres países contra los que el republicano apunta, pero la historia del fentanilo en Estados Unidos nace en la industria farmacéutica y pone en relieve un problema de salud pública. ¿Son las medidas de seguridad fronteriza la solución? Lo analizamos.
