
El rojo se extiende en lo que va del año y el nerviosismo por el nuevo esquema cambiario que se desconoce pero se intuye, podría generar que este sea definitivamente un mal año para la apuesta en pesos esperando altos retornos en dólares
El rojo se extiende en lo que va del año y el nerviosismo por el nuevo esquema cambiario que se desconoce pero se intuye, podría generar que este sea definitivamente un mal año para la apuesta en pesos esperando altos retornos en dólares