
Antes del 30 de enero, la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) debe dejar de operar en Jerusalén Este por orden de Israel. La decisión llega tras meses de acusaciones por parte del Gobierno de ese país, de que la organización ha tenido vínculos con Hamás. La UNRWA es la principal fuente de ayuda para los palestinos en la Franja de Gaza, que está siendo azotada por una guerra que ha dejado más de 47.000 muertos. Hablamos con Raquel Martí, directora ejecutiva de la UNRWA en España, sobre las medidas de la Agencia para contrarrestar la situación y el impacto del retiro.